
Ahí estaba ella, al final de la calle, llevaba los pantalones que mas me gustaban, ¡le quedan tan bien! eran los pantalones que llevaba el primer día que la conocí, el jersey la hacía un poco más delgada y le hacía su figura aún más bonita.
Sin darme cuenta me había quedado quieto, mirándola, el corazón me latía fuerte, como siempre que la veía. No podía dejar de mirarla, con su pelo largo hasta media espalda, ondulado, castaño, tan bonito, siempre brilla su pelo. No se porque, pero la veía más alta y esbelta, más guapa si eso era posible, puede que fuera por el sol, los primeros rayos de verano siempre le hacen diferente, la hacen más especial, a lo mejor es porque fue por estas fechas que la conocí, ahora hace cinco años, era una niña ahora que lo pienso, pero me enamoré de ella.
Volví a caminar, hacia ella y ella seguía mirando hacia el frente, ni me había visto. Cada vez mas cerca. Cada vez me late mas fuerte el corazón. La quiero. La amo. Es mi vida. Cada vez mas cerca, yo solo nos separan unos pocos metros. Gira la cabeza hacia mi, me mira. Sonríe. Una sonrisa tímida.
- Hola
- Hola
Se para un coche delante nuestro.
- Me tengo que ir, cuídate.
- Igualmente
Un gesto con la mano de despedida. Una cordial sonrisa. Se sube al coche. Es un chico. Me quedo quieto, mirándola.
Y un beso en los labios del chico.
El coche se pone en marcha y se van.
Yo me quedo solo, mirándola.
La perdí una vez más.
Ais, que desencanto al final, que para la proxima oportunidad que se le presente la aproveche (: Besos
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